HERNIA DISCAL LUMBAR. DR. BERNARDO MOSQUEIRA


HERNIA DISCAL LUMBAR

Definición

El disco intervertebral actúa absorbiendo las fuerzas que se ejercen sobre la columna vertebral. Es el “amortiguador” de las vértebras. Esta formado por una capa externa, llamada anillo fibroso y una interna llamada núcleo pulposo. El disco se degenera con la edad y con la actividad, pudiendo romperse el anillo fibroso y expulsar el núcleo pulposo hacia el canal espinal, comprimiendo las raíces que se encargan de la movilidad y la sensibilidad de los miembros inferiores.
Los discos lumbares que más se hernian son el que hay entre la 4º vértebra lumbar y la 5º (L4-L5), así como el que hay entre la 5º y la 1º vértebra sacra (L5-S1), en estos dos discos se producen el 90% de las hernias lumbares.



 Datos de interés. Epidemiología

·      Es una dolencia muy frecuente; el 90 % de la población mundial tiene, al menos, una crisis de dolor lumbar durante su vida.
·      Es el segundo motivo de consulta médica después de las enfermedades respiratorias (15% de todas las consultas).
·      Supone el motivo más frecuente de incapacidad en personas menores de 45 años.
·      Las hernias discales aparecen en tan sólo un 1-3 % de los dolores en la espalda.
·      Las personas de  mayor riesgo a padecer hernia discal son los hombres y entre los 30 y 60 años.

Factores de riesgo

·      Factores genéticos: hay personas que presentan predisposición a tener hernias lumbares.
·      Sobrepeso: si añades peso a la columna vertebral, la columna “sufre”.
·      Tabaco: acelera la degeneración de los discos.
·      Esfuerzo: el levantar peso de forma repetida o someter a grandes esfuerzos o vibraciones, la columna vertebral puede acelerar la aparición de una hernia discal. Trabajos que requieren grandes esfuerzos y levantamiento de pesos aumentan la probabilidad de sufrir una hernia discal.

Sintomatología

La sintomatología puede desarrollarse de forma rápida en unos minutos tras un esfuerzo o más lentamente en días o meses.
Las hernias discales en su mayoría pueden producir dolor en las piernas. Un  dolor tipo calambre que recorre la pierna. Dependiendo de la altura de la herniación puede aparecer el dolor en la zona anterior de la pierna o en la posterior. La más común es la ciática, que consiste en un dolor que se desplaza desde la zona glútea, por la cara posterior de la pierna hacia el pie, aumentando al toser o con los esfuerzos. Ésta suele producirse cuando los discos herniados son los lumbares más bajos (L4-L5, L5-S1).
También puede producirse pérdida de fuerza, siendo típica la imposibilidad de extender el pie (movimiento que se realiza al pisar el acelerador del automóvil o al ponerse de “puntillas”) o flexionar el pie (al intentar caminar de talones).
La sensibilidad de las piernas y el manejo de los esfínteres también pueden verse afectados.

  

Diagnóstico

Además del diagnóstico clínico. Hoy en día se requiere una Resonancia magnética lumbo-sacra sin contraste de la columna lumbar para poder realizar un correcto diagnóstico anatómico. 





 Tratamiento

Tratamiento médico

En principio y si no existe peligro de lesión en el nervio o raíz nerviosa afectada, el tratamiento de la hernia lumbar es conservador. Se debe realizar reposo en la fase más aguda (2-3 días) y, si el paciente continúa estable, se debe esperar 6 semanas aproximadamente para valorar si la clínica ha remitido. Siguiendo este criterio, el 80% de las hernias no requieren cirugía. Se recomienda tratamiento analgésico-antiinflamatorio y reposo durante este periodo.

Tratamiento quirúrgico

En los casos en los que hay una importante afectación del nervio o nervios afectados, produciendo pérdida de fuerza en las piernas, afectación de los esfínteres o dolor muy severo resistente a tratamiento médico se recomienda cirugía.

Microdiscectomía lumbar

La cirugía en la mayoría de los casos consiste en un abordaje por la espalda para extracción del disco herniado. Generalmente se puede extraer la totalidad del disco o solamente la porción del disco que se herniado.
Los abordajes pueden ser: abiertos, en los que no se utiliza microscopio o endoscopio; microquirúrgicos y endoscópicos. Se recomiendan los abordajes microquirúrgicos y/o endoscópicos, como la microdiscetomía lumbar . En esta técnica se utiliza un microscopio que con sus aumentos se consigue una mejor visión de la anatomía y permite que la apertura en piel es de menor tamaño, la pérdida de sangre menor, el daño a las estructuras adyacentes se minimiza en gran medida y se reduce el tiempo de ingreso y recuperación.

 




Comentario

Existe una tendencia por parte de muchos cirujanos a fijar la columna lumbar, con placas y tornillos, en los casos de pacientes con hernia discal simple,  sin embargo esta práctica no aporta beneficio alguno y si agrega mucha morbilidad.
Con este tipo de intervenciones quirúrgicas, la herida quirúrgica es de mayor tamaño, lo cual produce más dolor, aumento del riesgo de infección, mas días de ingreso hospitalario, limitación de la movilidad lumbar y a largo plazo afectación de los segmentos discales adyacentes.
Por todo esto, el abordaje microquirúrgico con incisiones quirúrgicas pequeñas, es el tratamiento quirúrgico de elección, con excelentes resultados y casi nula morbilidad.





  


En la foto de arriba se puede ver la herida quirúrgica de una hernia discal lumbar, intervenida con fijación lumbar.

En la foto de abajo, la herida quirúrgica, de una hernia de disco lumbar, intervenida con microcirugía un mes después de la intervención. 


Bibliografía

1. Lindsay KW, Bone I, Fuller G. Lumbar disc prolapse. Neurology and Neurosurgery illustrated. Fifth Edition. Churchill Livingstone, editor. 2010. P. 406-409.
2. Chen MZ. Serie Radiología Clinica. Los 100 diagnósticos principales en Columna vertebral. Trastornos degenerativos, Hernia de disco. Elsevier, editor. 2004. P. 102-104.
3. Duhon BS., Schmidt MH. Lumbar Microdiscectomy: Indications and Techniques. Schmidek & Sweet operative neurosurgical technics. 6th Edition. Elsevier, editor. 2012. P. 1854-1864.